BoRjItA_NoN
31/03/2009, 17:50
Un joven ha sido condenado a un año de cárcel y a otros tres sin poder conducir por haber provocado un accidente en la localidad guipuzcoana de Irun cuando circulaba con un coche sin seguro ni carné, a más de 80 kilómetros por hora, bajo la influencia de bebidas alcohólicas y con una pierna escayolada.
Según la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal número 2 de San Sebastián, los hechos ocurrieron hacia las diez y media de la noche del 17 de febrero de 2007 cuando el joven, de 29 años, conducía un coche de su propiedad sin el seguro obligatorio ni permiso de conducir a más de 80 kilómetros por hora por el céntrico paseo de Colón de Irun.
El acusado estaba además bebido y tenía una pierna escayolada al haber sido operado de fractura de peroné.
Peligro para los viandantes
El juzgado considera que el conductor puso "en manifiesto peligro la vida e integridad" de viandantes y conductores de otros vehículos cuando, al pasar por un cruce peligroso entre el paseo de Colón, la calle de la Estación y la de Lope Irigoyen, se saltó dos pasos de cebra y chocó por alcance con otro vehículo.
A consecuencia de la colisión, su coche "voló y quedó semivolcado tras" chocar con otros dos turismos estacionados en este lugar, que también resultaron con daños materiales.
La sentencia señala que el acusado, a pesar de quedar conmocionado por la fuerte colisión, de que estaba bebido y de que tenía una pierna escayolada, se dio a la fuga a pie al no poder arrancar su coche semivolcado.
Por todo ello, ha sido condenado como autor de un delito contra la seguridad del tráfico a un año de prisión y privación del derecho a conducir por tres años.
Según la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal número 2 de San Sebastián, los hechos ocurrieron hacia las diez y media de la noche del 17 de febrero de 2007 cuando el joven, de 29 años, conducía un coche de su propiedad sin el seguro obligatorio ni permiso de conducir a más de 80 kilómetros por hora por el céntrico paseo de Colón de Irun.
El acusado estaba además bebido y tenía una pierna escayolada al haber sido operado de fractura de peroné.
Peligro para los viandantes
El juzgado considera que el conductor puso "en manifiesto peligro la vida e integridad" de viandantes y conductores de otros vehículos cuando, al pasar por un cruce peligroso entre el paseo de Colón, la calle de la Estación y la de Lope Irigoyen, se saltó dos pasos de cebra y chocó por alcance con otro vehículo.
A consecuencia de la colisión, su coche "voló y quedó semivolcado tras" chocar con otros dos turismos estacionados en este lugar, que también resultaron con daños materiales.
La sentencia señala que el acusado, a pesar de quedar conmocionado por la fuerte colisión, de que estaba bebido y de que tenía una pierna escayolada, se dio a la fuga a pie al no poder arrancar su coche semivolcado.
Por todo ello, ha sido condenado como autor de un delito contra la seguridad del tráfico a un año de prisión y privación del derecho a conducir por tres años.