Alonso, segundo, subcampeón 2012; la carrera termina con el Safety Car
Jenson Button ha ganado un Gran Premio de Brasil "alocado", como quería que fuera Fernando Alonso. El asturiano luchaba contra Sebastian Vettel por el título de campeón, aunque finalmente ha sido el alemán de Red Bull quien se lo ha llevado, convirtiéndose así en el tricampeón más joven de la historia de la F1 y firmando de nuevo un doblete para el equipo de Milton Keynes.
Si hay alguna expresión que podamos decir de la carrera que acabamos de vivir es ¡wow! ¡Vaya carrera a la que hemos asistido! Desde la primera a la última vuelta el desenlace del Campeonato del Mundo ha estado en el aire. Cualquier cosa ha podido pasar, demostrando que esta nueva Formula 1 es puro espectáculo y emoción y uno de los deportes más alucinantes de este planeta.
Jenson Button ha ganado una carrera épica, realizando una conducción inmejorable y aprovechándose de un error de Nico Hulkenberg al intentar adelantar a Lewis Hamilton. Un Gran Premio ante todo muy difícil de leer por las condiciones tan cambiantes por las que ha pasado con momentos de pista seca, lluvia ligera y aún más fuertes y que se lo ha llevado el mejor coche en esta pista, el McLaren.
Por su parte, tanto Fernando Alonso como Sebastian Vettel han hecho el trabajo que correspondía a cada uno, pero al final también el Campeonado ha recaído en el mejor coche de la parrilla en esta segunda mitad del año: el Red Bull. Sebastian Vettel ha hecho una carrera muy cerebral, sin arriesgar nada, siguiendo en todo momento las evoluciones del asturiano, aunque ha estado un poco más nervioso y su exceso de celo a punto ha estado de costarle quedar fuera de carrera. Alonso, por su parte, ha hecho lo máximo: adelantar en la salida a bastantes coches y aprovecharse de las situaciones de carrera, lo que lo han colocado segundo en el podio de Interlagos. El español ha acabado este Mundial como subcampeón y a sólo tres puntos de Sebastian Vettel con un coche que en ningún momento ha estado a la altura.
Marcadores